Estas costillas de cerdo son deliciosas con un aroma exquisito, la combinación de lo salado con lo dulce hace un platillo delicioso.
Frota el ajo prensado por todas las secciones de la costilla de cerdo. Sazona generosamente con sal y pimienta negra, y frota con un poco de aceite de avocado. Déjala reposar a temperatura ambiente por 30 minutos.
En una cacerola pequeña pon a calentar a fuego lento la miel, el romero, la ralladura de limón, y las hojuelas trituradas de pimiento rojo. Aparta mientras trabajas con las costillas.
Precalienta el horno a 350 grados. Quita el ajo de las costillas y deséchalo.
Calienta una sartén grande a fuego medio-alto y agrega un poco del aceite de aguacate para sellar las costillas a un lindo color dorado, por unos 4 minutos. No es necesario sellar ambos lados ya que se dorarán en el horno mientras se asan.
Cuando termines de dorar todas las secciones de las costillas, colócalas en una fuente para horno y hornéalas hasta que estén blandas y la carne comience a desprenderse del hueso, aproximadamente 2 horas; si se oscurecen y aún están duras, cúbrelas con papel de aluminio y agrega un poco de agua a la fuente y continúa horneando.
Cocine a una temperatura mínima interna de entre 145° y 160° F. Después de sacar las costillas del horno, déjalas reposar por 3 minutos, unta la mezcla de miel y disfruta.
Utiliza el espacio extra en el horno mientras asas las costillas de cerdo para crear unos deliciosos vegetales asados.