Enjuaga el arroz. Agrega 1 parte de líquido por 2/3 partes de arroz. Lleva el agua a ebullición. Una vez que esté hirviendo, agrega una pizca de sal. Reduce el fuego a bajo, cubre la olla con una tapa hermética, y mantén a fuego lento. Cocina hasta que se absorba el agua, unos 18 minutos. Apaga el fuego y deja reposar el arroz tapado durante 10 minutos. Revuelve el arroz con un tenedor y deja de lado.
En un recipiente, combina los trozos de carne de cerdo con la salsa de soja baja en sodio y la miel. Deja reposar durante al menos 20 minutos y hasta 2 horas.
Calienta una cucharada de aceite vegetal en un wok o una sartén antiadherente grande a fuego medio/alto. Agrega los huevos y revuélvelos suavemente con una espátula de goma hasta que se cocinen ligeramente pero aún estén blandos, aproximadamente durante 1 minuto. Transfiere a un plato y reserva.
Agrega la cebolla, la carne de cerdo escurrida (no deseches el adobo) y cocina de 3 a 4 minutos a fuego medio/alto.
Agrega el aceite vegetal restante y deja calentar por unos segundos. Agrega el arroz integral cocido, los guisantes y las zanahorias, la piña, los trozos de plátano y el adobo que reservaste de la carne de cerdo, y saltea a fuego medio/alto hasta que el arroz comience a tomar un tono dorado, de 3 a 4 minutos. Agrega los huevos y el aceite de sésamo a la sartén. Ajusta los condimentos a tu gusto y agrega salsa de soja adicional si lo deseas. Sirve en boles y añade encima rodajas de cebolla verde y cilantro fresco.